lunes, junio 16

[+] Vida para la cicloruta.

Hace mucho años en lugar muy, pero muy cercano alguien pensó que las miles de personas que se movilizaban en dos ruedas se merecían vías propias. Contrataron por muchos millones que se hicieran agujeros, se transportara tierra y se instalara una cinta asfáltica. Todos aplaudieron, incluso otros posaron en corbata, al lado de su vehículo y orgullosos por el paso que se estaba dando, sonreían; este es un "gran pedalazo para la humanidad", dijo un político dicharachero llamado Neil Bossa. Todo era felicidad, tales vías pronto se llenaron de bicicletas. Unos iban, otros venían.

Transporte ecológico, barato y hasta saludable (si es que a usted no le tocaba atravesarse la ciudad)... De esta historia ya hace varios años, ahora esa cinta es parte del pasado. Algunos todavía osan usarla esquivando peatones los cuales ya olvidaron bajo sus pies tan digna presencia y los vendedores ambulantes con sus carretas, escaparates y mantas usan este espacio olvidado y ahora reutizado.

Ante tantos obstáculos, las dos ruedas volvieron a milimetros de los respetuosos automóviles, el "gran pedalazo para la humanidad" ya no es importante para nadie, tal vez los interesados tienen más de "un metro" de frente y están pensando en otros medios que den más dinero y que nos puedan transportar de aquí al "Polo".

viernes, junio 13

[+] riesgos capitales

Aparte de uno que otro concejal corrupto, cientos de huecos en las calles, algunos taxistas abusivos y muchos amigos de lo ajeno creo que deberíamos recordar esos riesgos que pueden hacernos amar a nuestra querida Bogotá.

Vivir en Bogotá es un constante riesgo de:

- Quejarse a diario de lo buen vividero que es esta ciudad que nos trata tan mal...
- Disfrutar de tardes soleadas, donde el azul del cielo y la temperatura del ambiente nos hacen olvidar que estas tierras las llamábamos "la nevera".
- Poder "vitriniar cada tres cuadras" porque ahora parece que hay más centros comerciales que casas.
- Saber que las mujeres más lindas son las paisas, las bumanguesas, las caleñas, las llaneras, las costeñas y ¡todas estudian o viven aquí!
- Tenemos todo el abecedario para disfrutar a todos los precios y todos los sabores: zona T, G, M, U y hasta H.
- Semanalmente saber que inauguraron un nuevo megacolegio distrital allí donde los niños lo necesitan... ¿también tendremos megaprofesores?
- Tener todo tipo de "consulados" donde los vallenatos,, los boyacos, los salseros, los regetoneros, los paisas, los tangueros, los champeteros, todos... tenemos donde sentirnos en casa, ya sea por la música o por la comida.

Claro hay muchos más riesgos, pero en el que gustaría que todos asumiéramos es el de considerarnos ciudadanos y construir una mejor ciudad con nuestra civilidad, con nuestro "don de gentes", con nuestra capacidad de quejarnos, denunciar y participar. Esta meseta llamada Bogotá lejos está de ser el mejor lugar para vivir, pero también podría estar más cerca: tarea de los de arriba, de los de abajo y desde los de al lado.

martes, junio 10

[-] abusos con los peatones

Siempre fui un convencido de la cultura ciudadana, que los mimos, las cebras, el semáforo y todas aquellas cositas que la administración Mockus nos dejó habían quedado en el imaginario y en la ética civil de muchos y que eso mejoraba el nivel de vida de todos, pero esta mañana casi me arrollan esta creencia:

Una mujer madura, al volante de un corsa rojo (BME- 469), casi me atropella y a parte me puso todo el ruido de su pito en mis oídos. Bueno, en aras de la movilidad de la ciudad el peatón debe pasar rápido, pero si hay un semáforo en verde para el peatón, la vía es de este y el carro debe parar.
De hecho en algunos cruces ya está funcionando el semáforo intermitente que avisa que el automóvil puede pasar pero la prioridad es del peatón. Así que la alevosía de esta señora se la cobre parándome frente al carro, mostrándole mi semáforo que estaba en verde y manoteando como loco y con la parsimonia propia de mi rabia y con el pito aún zumbando mis oídos y apoyado como por 5 peatones mas que le gritaban cosas a la vieja, saque la cámara fotográfica y antes que me echara el carro encima, camine unos pasos y guarde para la posteridad este momento.

domingo, junio 1

[+] sueños capitales

Soñé que nos daban la Sede del segundo evento más importante de la FIFA.

Soñé, que faltarían más de dos años para su realización. Soñé que la Alcaldía Mayor y la empresa privada se sentaban a programar muchas cosas. Soñé que era la oportunidad de volverle a dar un empuje al desarrollo de la ciudad.

Soñé con un transporte publico integrado, entre Transmilenio y buses de verdad, con paraderos, horarios y sin guerra del centavo. En mi sueño también había más esculturas en la ciudad, parques y miles de voluntarios entre los jóvenes de los últimos años de bachillerato y de los primeros semestres de las universidades, casi todos ellos bilingües. Como pasa con los sueños no me acuerdo de todo, pero el final había un Concejo de la ciudad lleno de corrupción como en la actualidad que trancaba todo, también había una mafia del transporte que sigue llenando la ciudad de busetas, rutas y guerra del centavo y soñé con miles de personas que critican el evento porque es muy caro y que ese dinero se debería invertir en la gente que tiene hambre (¿Y es que el desarrollo no genera empleo, turistas y calidad de vida y ultimas mitiga el hambre de muchos?) y además soñé que la inauguración era transmitida por TELESUR entonces me desperté, gracias a Dios.